lunes, 18 de julio de 2011

Hasta septiembre

Han sido más de dos centenares de protagonistas los que han pasado por nuestro blog desde que arrancaramos hace casi diez meses. En ese tiempo hemos descubierto que muchos futbolistas que alcanzaron prestigio sobre el césped intentaban trasladarlo a su carrera como entrenadores. Desde Islandia hasta Sudáfrica, desde Estados Unidos hasta Nueva Zelanda, por aquí han pasado algunos que han prolongado su buena fama en los bancos, y otros que han tenido menos fortuna.
Como los futbolistas, nos vamos de pretemporada para llegar frescos al inicio del nuevo curso futbolístico.

Nos vemos.

viernes, 15 de julio de 2011

Steve Bruce



Si Tony Adams es un símbolo del Arsenal de las últimas décadas, Steve Bruce lo es del Manchester United. A pesar de no haber jugado nunca con los "pross", Bruce se convirtió en todo un ídolo de la grada de Old Trafford, jugando más de 300 encuentros con los "diablos rojos" y ganando todos los títulos existentes en Inglaterra, además de una Recopa y una Supercopa de Europa.
La trayectoria de este central se completó con once campañas en activo, repartidas entre Gillingham, Norwich, Birmingham y Sheffield United, donde empezó a entrarle el "gusanillo" de los banquillos.
En su debut como técnico dejó al United octavo de la First Division, dando además muestra del carácter del que hizo gala como defensa al retirar a sus futbolistas del campo en una eliminatoria de la FA Cup ante el Arsenal tras no devolver los "gunners" un balón que sus hombres habían lanzado previamente fuera para atender a un lesionado.
Al final de esa temporada decidió abandonar su puesto debido a la falta de fichajes del club y estuvo a punto de abandonar su carrera de entrenador para dedicarse a comentar partidos en la televisión.
Sin embargo, el Huddersfield Town consiguió persuadirle para que reconsiderara su postura. Tras un arranque positivo, con el equipo en puestos de play-off, se produjo el bajón de los "terriers", que no consiguieron su objetivo.
La mala racha se alargó al inicio de la 2000-2001, y tras una serie de resultados negativos Bruce fue cesado el 16 de octubre de 2000.
A pesar de tener una oferta del Queens Park Rangers no fue hasta abril de 2001 cuando dió el paso de volver a dirigir un equipo, el Wigan. Consiguió meterse en la fase de ascenso, pero al perder en semifinales decidió hacer las maletas.
Su siguiente club fue el Crystal Palace, al que parecía llevar directamente de vuelta a la Premier, pero tres meses después de llegar al cargo lo abandonaba al ser llamado por el Birmingham.
Su decisión no fue equivocada, logrando el ascenso a la Premier al derrotar al Norwich en la eliminatoria decisiva. La llegada de hombres como el francés Dugarry fortaleció el proyecto "blue", que consiguió la permanencia con solvencia y superando incluso al eterno rival, el Aston Vila, algo que no sucedía desde la década de los setenta.
Al año siguiente mejoró posición, acabando en décima posición.
En junio de 2005 se habló de prolongar su contrato durante cinco temporadas más, pero el interés del Newcastle hizo que ese acuerdo pudiera quedar en papel mojado.
Sin embargo, finalmente Bruce siguió fiel al Birmingham. Las expectativas eran altas, pero el equipo finalizó nuevamente a mitad de tabla.
La cosa se complicó en la 2006-2007, donde un inicio discreto y una humillante goleada ante el Liverpool en la FA Cup (7-0) hizo que surgieran las primeras voces pidiendo la destitución del técnico del Northumberland.
El descenso a The Championship no arrastró a Bruce, que emprendió la difícil labor de devolver al Birmingham a la Premier. Pero esta vez Bruce y los suyos no fallaron, y a pesar de que el liderato se les escapó en la última jornada, firmaron la vuelta a la élite del fútbol inglés por la puerta grande.
La llegada de Carson Yeung como máximo accionista creó dudas en cuanto a su continuidad, y en noviembre de 2007 el Wigan se hacía con los servicios del ex del Manchester previo pago de 3 millones de libras.
Bruce pasaba a cobrar la astronómica cifra de 2 millones de libras, y para merecerlos debía salvar a los "latics" del descenso. Lo logró con cierta solvencia, y eso hizo que el Newcastle llamara de nuevo a su puerta, aunque la respuesta fue otra negativa.
Su segunda temporada fue aún mejor, acabando en la zona media pese al traspaso de Wilson Palacios al Tottenham en el mercado invernal.
Pese a todo Bruce decidió cambiar de aires, y el 3 de junio de 2009 firmaba un contrato por tres temporadas con  el Sunderland. Pese a un rendimiento irregular, los "Black Cats" salvaron  la categoría con solvencia a final de año.
mejor aún le han ido las cosas la temporada que acaba de finalizar, ya que el Sunderland escaló hasta la décima plaza, a sólo dos puntos de la octava ocupada por el Fulham. Esos logros han provocado que su contrato se alargara el 11 de febrero, con lo que su nuevo compromiso expirará en junio de 2014.

jueves, 14 de julio de 2011

Jorge da Silva



Salido de los potreros de Fénix, también Danubio y Defensor Sporting tuvieron a este goleador en sus filas antes de que aterrizara en España en el mercado invernal de la temporada 1982-1983 para fichar por el Valladolid.
Tras media vuelta de aclimatación, la segunda temporada en Pucela consagró al "Polilla", que fue Pichichi y contribuyó a la consecución de la Copa de la Liga por los blanquivioletas. Su tercer año fue el último en Zorrilla, firmando por el Atlético de Madrid al final de la 1984-1985.
Allí jugaría dos temporadas, con un rendimiento goleador que fue de más a menos debido a la falta de confianza de Luis Aragonés.
Finalizado su periplo europeo volvió a Sudamérica, para seguir goleando en Argentina, Chile y Colombia antes de colgar las botas en uno de sus primeros equipos, el Defensor Sporting, en 1997.
A los títulos a nivel de club en varios países unió a su retirada 26 partidos internacionales y 6 goles con la selección de su país, con el que disputó el Mundial 1986 y la Copa América 1993.
El cambio de siglo supuso también novedades para el antiguo delantero charrúa, que se desempeñó como seleccionador sub 17 y sub 20, a la vez que actúo como ayudante de Víctor Púa en el combinado absoluto (fue incluso interino después del Mundial de Japón y Corea). En el Sudamericano juvenil de 2003, disputado en casa,  su equipo fracasó, no logrando billete para el Mundial de la categoría.
Esos malos resultados hicieron que su trayectoria se paralizara durante dos años y medio, hasta que fue contratado por Defensor Sporting para dirigir su primer equipo. Su éxito fue casi inmediato, logrando alzarse con el Apertura 2007, y finalizando el año con el título nacional por delante de River Plate, Nacional y Peñarol y los cuartos de final de la Copa Sudamericana.
No pudo repetir al año siguiente, pero su equipo hizo una gran Copa Libertadores, donde sólo el Estudiantes argentino fue capaz de cortar el pase a semifinales del cuadro "violeta".
Con un caché creciente Da Silva emprendió la aventura árabe para dirigir al Al Nassr, donde sucedería al argentino Edgardo "Patón" Bauza. Ese paso atrás, propiciado por la oferta económica, finalizó cuando a mediados de noviembre del año pasado aterrizaba en una liga más competitiva, la argentina.
Llegaba a Godoy Cruz para sustituir a Omar Asad, que había sorprendido con una muy buena campaña como debutante en primera división al llevar al equipo mendocino a un inédito quinto puesto en el Torneo Apertura.
Volvía a disputar la Libertadores y se estrenaba en la Primera con el objetivo de emular a su antecesor. Su debut en el puesto no pudo ser más espectacular, aplastando a Boca en la mítica Bombonera por un inapelable 4-1. Repitió triunfo en el primer partido de la fase de grupos de la competición sudamericana, venciendo al Liga de Quito ecuatoriano.
En liga se mantuvo en la parte de arriba, pero en la competición continental dos derrotas ante Peñarol y Liga de Quito impieron al Tomba meterse en la siguiente fase del torneo.
Centrados ya en el final del Clausura, los "bodegueros" fueron los únicos capaces de plantar batalla a Vélez y Lanús en la lucha por el título, aunque cedieron en la antepenúltima jornada al caer 2-0 en El Fortín de Liniers, finalizando terceros en el campeonato finalizado hace apenas un mes.

miércoles, 13 de julio de 2011

Zoran Njegus



Seis años en la liga española, defendiendo los colores de Atlético de Madrid y Sevilla, hacen que nuestro protagonista de hoy no sea un desconocido ni mucho menos. Surgido en el Sloboda Uzice, el paso por el Estrella Roja de Belgrado hizo que este centrocampista de corte defensivo recalara en el Vicente Calderón. Ni en Madrid ni en Sevilla pasó de ser un futbolista de equipo, no llegando al centenar de encuentros en Primera.
Su último año en el club de Nervión estuvo lleno de dificultades: fue sancionado por el cuadro hispalense al retrasar su retraso tras las vacaciones navideñas, y finalmente le fue rescindido el año de contrato que le quedaba por cumplir. Ese suceso coincidió con su retirada de los terrenos de juego, apenas superada la treintena.
Dejaba atrás un puñado de partidos con la selección serbia, y una carrera envidiable teniendo en cuenta que su calidad futbolística no era ni mucho menos destacada.
De vuelta a su país trabajo como asistente de Slobodan Krcmarevic en la cantera del Partizan, ascendiendo posteriormente para ejercer esa misma labor en la primera plantilla del Estrella Roja al lado de Milorad Kosanovic.
Su estreno como primer entrenador no pudo ser en otro sitio que en el club de su ciudad, el Sloboda Uzice, aunque su primera gran oportunidad llegó el 25 de septiembre del año pasado, cuando se hacía cargo del FK Javor en sustitución de Radovan Curcic.
Tres puntos de quince posibles imponían el cambio en el banquillo, y Njegus recibió el encargo de enderezar la nave, contando con el apoyo de Milan Simeunovic y Goran Maric. Con una temporada muy regular los de Ivanjica consiguieron acabar octavos, a sólo un puesto de repetir la posición alcanzada la temporada anterior.
Ese buen papel hizo que un mes antes de cumplir 37 años, el pasado 7 de junio se convirtiera en el entrenador del Spartak Zlatibor Voda, días después de que Ljubomir Ristovski anunciara que no continuaría en el banco de los de Subotica pese a dejar al equipo quinto en la Super Liga.
Con esos antecedentes, Njegus tendrá un reto importante que superar a partir del próximo 13 de agosto, cuando arrancará la temporada recibiendo en casa ni más ni menos que al Estrella Roja.

martes, 12 de julio de 2011

Eric Roy



Niza vió nacer a este centrocampista, que después de jugar en el club de su ciudad y en el Toulon antes de saltar al Olympique de Lyon, donde pasó tres años. Pieza clave para los lioneses, en 1999 se trasladaba a Marsella para jugar en uno de los grandes del fútbol galo, el L´OM, donde marcó una decena de goles en más de un centenar de encuentros en la Ligue 1.
Temporada y media en el Sunderland inglés y medio año en el Troyes fueron el preludio de una brevísima estancia en la liga española, donde pasó con más pena que gloria por las filas del Rayo Vallecano.
En el verano de 2002 volvió donde había empezado todo, aterrizando en Stade Municipal du Ray para volver a enfundarse la camiseta de "Les Aiglons" en sus dos últimos años como profesional. Tras una primera campaña en la que lo jugó casi todo y llegó a marcar un par de goles, su rol pasó a ser secundario en su segundo año, retirándose a final de temporada, con la única espina de no haber conseguido vestir la elástica "bleu".
No queriendo desvincularse del club de su ciudad, Roy quedó encuadrado dentro del esquema organizativo de la entidad de la Costa Azul, ejerciendo varias funciones.
La última de ellas fue la de director deportivo, cargo que ocupaba cuando el 10 de marzo del año pasado se produjo la destitución del técnico de la primera plantilla, Didier Ollé-Nicolle. Con el equipo a punto de entrar en la zona de descenso, el presidente del club, Gilbert Stellardo, anunciaba que el grupo formado por Eric Roy, René Marsiglia y Frederic Gioria se haría cargo de la situación hasta final de temporada.
Tres victorias consecutivas ante Le Mans, PSG y Toulouse colocaban al Niza lejos de la parte baja de la tabla y con un sprint final más que positivo los de la Costa Azul salvaban la categoría con una solvencia inesperada.
Su segundo año empezó a lo grande, con dos victorias y tres empates que dejaban a su equipo cuarto en la clasificación. Ese arranque fulgurante se fue frenando con el avance de la primera vuelta, que terminaron con cuatro puntos de ventaja sobre el descenso.
Mientras, el mejor rendimiento del Niza quedó para la Copa de Francia, donde tras eliminar a Olympique de Lyon, Drancy y Stade Reims sólo el Lille evitó que alcanzara la gran final.
De vuelta a la Ligue 1, la renta de los de Roy quedó reducida a un punto sobre el antepenúltimo clasificado, el Nancy, cuando quedaban cinco partidos con disputar.
Las victorias ante el colista Arles-Avignon y el Lorient fueron fundamentales para sellar la permanencia del Niza, en un año complicado en la competición liguera, pero brillante en el torneo del KO.
Ese logro ha hecho que se haya mantenido la confianza en el trabajo de Roy, que a partir del próximo 6 de agosto afrontará el arranque de su tercera temporada en el banco del Municipal du Ray.

lunes, 11 de julio de 2011

Robert Warzycha



Este mediocampista triunfó en Polonia, donde ganó dos Ligas y una Supercopa vistiendo los colores del Gornik Zabrze antes de dar el salto en 1991 al Everton de la Premier League. Allí tuvo el honor de ser uno de los trece futbolistas que participó en el estreno de la rebautizada liga inglesa junto a hombres como Cantona, Schmeichel o Kanchelskis.
Tres años impartiendo magisterio en la medular de los "blues" y el polaco se despedía de las grandes ligas europeas para jugar sus últimas temporadas en Europa en Hungría, primero en el Pecsi Mecsek y después en un histórico venido a menos, el Honved.
En 1996 Warzycha hacía las maletas y cruzaba el Atlántico para jugar en el Columbus Crew de la Major Soccer League. Durante seis años enamoró a la afición de Ohio, que idolatró al "Rifle polaco".
Mermado por las lesiones se retiró ya cerca de los cuarenta en 2002, aunque este internacional con Polonia decidió ponerse a disposición de su último club para convertirse en segundo entrenador de la primera plantilla. Su labor era la de apoyar al técnico que había tenido en sus últimos años en activo y con el que había ganado su único título en EEUU (la Open Cup), Greg Andrulis.
Merced a ese trofeo este tándem afrontó la Copa de Campeones 2003, donde eliminaron al Árabe Unido panameño, pero cayeron ante los Monarcas Morelia mexicanos.
Al año siguiente mejoró el papel de los de Ohio ganando la MLS Supporters' Shield, lo que hizo que el jefe de Warzycha fuera nombrado entrenador el año en la MLS.
Partícipe de estos logros, el 12 de julio de 2005 el ex-internacional polaco vió como se le abrían las puertas del banquillo del Columbus Crew Stadium. La mala clasificación del equipo, último en la Conferencia Este, hizo que Andrulis fuera despedido y su asistente fuera el elegido para sustituirle.
Pese al cambio, los Crew no abandonaron la posición de colistas, y Warzycha volvió a su rol de asistente, esta vez colaborando con Sigi Schmid.
2006 fue un año de reconstrucción de la franquicia, que volvió a quedarse fuera de los play-off, noticia que empeoró con el fallecimiento de su fundador, Lamar Hunt.
En 1997, con la MLS revolucionada por el aterrizaje de David Beckham en Los Angeles, Schmid y Warzycha apostaron por su particular crack, Guillermo Barros Schelotto, pero nuevamente se fracasó en el intento de entrar en la lucha por el título.
La espada pendía sobre la cabeza del entrenador, y parecía que Warzycha volvería a ser la solución a los problemas del equipo, pero con un juego más conjuntado y con un "Guille" funcionando a pleno rendimiento llegaron los éxitos, con la consecución de la Supporter's Shield y la MLS Cup. Pese a todo Sigi Schmid abandonó la entidad para fichar por los Seattle Sounders, lo que supuso el espaldarazo definitivo para Warzycha.
Su arranque no pudo ser mejor, alcanzando la Supporter´s Shield al ser el mejor equipo de la temporada regular, lo que aseguró a los aurinegros su participación en la Open Cup y CONCACAF Champions League al año siguiente. La nota negativa llegó en las semifinales de la Conferencia Este, donde el Real Salt Lake acabó consu sueño de seguir avanzando hacia la final de la MLS.
2010 empezó con la prolongación del contrato de Barros Schelotto, al que se unió mediada la temporada la contratación del peruano Andrés Mendoza. Los de Warzycha acabaron segundos en la Conferencia Este, siendo superados sólo por los New York Red Bull. Los Colorado Rapids cortaron su pase a semifinales de la MLS en la tanda de penaltis. 
En la Champions también rindieron a gran nivel, superando la fase de grupos y cayendo también en cuartos de final a manos del Real Salt Lake.
La salida de Guillermo Barros Schelotto, Frankie Hedjuk, Brian Carrol y otros futbolistas supusieron un cambio de ciclo para la franquicia de Ohio a finales del año pasado.
Esta temporada en la MLS el equipo ha ido de más a menos, y ahora mismo pelea por estar arriba en la Conferencia Este con New York Red Bull y Philadelphia Union, además de por entrar en las semifinales de la MLS Cup.

viernes, 8 de julio de 2011

Frank Rijkaard



Poco espacio hay para más trofeos en las vitrinas de Frank Rijkaard, que ganó todo lo que se puede ganar como futbolista gracias a su pertenencia a Ajax, Milán y a la selección holandesa. Sólo el Mundial se le resistió a este elegante centrocampista salida de la cantera "ajacied" y que triunfó a lo grande con el mejor Milan, el de Arrigo Sacchi. Tras su etapa en San Siro volvió a casa para retirarse en el Ajax, al final de la temporada 1994-1995.
Como muchos futbolistas de élite, Rijkaard pronto desarrolló su interés por conocer todo lo relacionado con la dirección técnica de equipos. Junto a Ronald Koeman formó parte del staff técnico de la selección "oranje" en el Mundial de Francia, participando en el tercer puesto logrado por los neerlandeses.
Tras la salida del cargo de Hiddink, la sorpresa fue mayúscula cuando la elección de la Federación recayó en su inexperto asistente. Debutó con un empate ante Alemania en un amistoso, pero en los siguientes encuentros de preparación para la Eurocopa de la que los suyos eran anfitriones el rendimiento no fue el deseado.
Rompieron esa mala imagen cuando se acercaba el torneo, en el que alcanzaron las semifinales, y en el que sólo Italia fue capaz de separarles de la final en la tanda de penaltis.
Un minuto después de esa dolorosa eliminación renunciaba al cargo, "después de no haber conseguido el objetivo que se había marcado, ganar el título".
Después de un año sabático el Sparta de Rotterdam le ofrecía la oportunidad de entrenar a nivel de club, y Rijkaard recogió ese reto para la temporada 2001-2002. La goleada ante el Feyenoord en la jornada inaugural fueron preludio de una temporada complicada, que finalizó con el descenso del conjunto.
Con ese precedente nadie esperaba lo que iba a suceder a continuación. En el verano de 2003 el nuevo Barça de Joan Laporta apostaba por el holandés para liderar el proyecto culé. Proyecto que estuvo de hacer aguas a mitad de temporada, sobre todo tras una dura derrota ante el Racing (3-0). Sin embargo, el equipo se rehizo para realizar una segunda vuelta espectacular y firmar el subcampeonato liguero, que sirvió para cicatrizar las decepciones en Champions League y Copa del Rey.
Las siguientes dos temporadas tienen poco que contar, ya que fueron de éxitos absolutos, ganando dos Ligas (2005 y 2006); dos Supercopas españolas (2005 y 2006); y rematando el brillante juego de los Ronaldinho, Etoo, Xavi, Deco y compañía levantando la segunda Champions en la historia del Barça en 2006.
Con la conquista de la "orejona" se convirtió en la quinta persona, en orden cronológico, en conseguirla como jugador y entrenador. Se unía así a un prestigioso club formado, ni más ni menos, que por Miguel Muñoz, Giovanni Trapattoni, Johann Cruyff y Carlo Ancelotti.
Pero ese equipo de ensueño que había enamorado a medio mundo entró en decadencia, y tras dos temporadas sin títulos Joan Laporta anunció el 8 de mayo de 2008 el final de la etapa de Rijkaard en Barcelona. El "tulipán" sería sustituido por un técnico joven, sin experiencia, pero con un carisma innegable entre la parroquia culé, Pep Guardiola.
El desgaste de cinco temporadas al máximo nivel hizo que Rijkaard parara otra vez, y no fue hasta el 5 de junio de 2009 cuando el holandés aclaraba su futuro, que estaría ligado al Galatasaray durante las dos siguientes temporadas.
Consiguió meter a los leones en la fase de grupos de la Europa League, que superó como campeón. En la segunda ronda se acabó la suerte de los otomanos, que fueron eliminados por el Atlético con un gol in extremis de Diego Forlán.
El correcto año del Galatasaray se completó con la tercera plaza en la Superliga y los cuartos de final de Copa.
Sin embargo, no iba a terminar su segunda campaña en Estambul. La eliminación en la fase previa de la Europa League y un discreto inicio liguero (rematado por una sorprendente derrota ante el Ankaragucu) provocaron el despido del ex-técnico del Barça el 20 de octubre del año pasado que, curiosamente, era reemplazado por otro símbolo del club al que dirigía, Gica Hagi.
Tras ser objeto de todo tipo de especulaciones en los últimos meses, Rijkaard volvía a dar un triple salto mortal para dejar a todos con la boca abierta y firmar hace unos días por la selección de Arabia Saudí, donde es previsible que gane más dólares que partidos.

jueves, 7 de julio de 2011

Walter Zenga



Curiosamente, aunque dicen que en el fútbol el portero es el que mejor ve lo que pasa en el campo, pocos son los guardametas que dan el salto al banquillo. Uno de ellos es Walter Zenga, histórico del Inter, Sampdoria y selección italiana en la década de los ochenta y noventa.
Ganador de dos Copas de la UEFA, un Scudeto y una Supercopa de Italia con los "Nerazzurri", acumuló honores individuales, pero se le escapó un título con la selección italiana.
Después de su dilatada trayectoria en Italia Zenga decidió "cruzar el charco" para vestir la zamarra del New England Revolution entre 1997 y 1999.
En Massachussets tuvo su primer contacto con la dirección de equipos, pero decidió continuar esta nueva etapa en Milán, dirigiendo a un conjunto amateur de Milán, el Brera.
Esos primeros escarceos desembocaron en su primer contrato serio, con el Nacional de Bucarest rumano, en donde llegó a dirigir encuentros en la Copa de la UEFA y terminó en la octava plaza liguera en la temporada 2002-2003. No terminó su segunda campaña, siendo cesado en diciembre de 2003.
Poco tardó en encontrar trabajo. En julio de 2004, a pocos días del inicio de la liga rumana, era contratado ni más ni menos que por el Steaua, tras la sorprendente renuncia de Victor Piturca. Con el todavía jugador Dorinel Munteanu como asistente. Pese a hacerlo muy bien en Europa, llegando a octavos de la UEFA tras eliminar al Valencia, la eliminación ante el Villarreal y el despegue de la Politécnica de Timisoara en la cabeza de la liga provocaron la destitución del italiano el 19 de mayo de 2005.
Ese verano cambiaba Rumanía por Serbia para comprometerse con el Estrella Roja de Belgrado, liderando a los rojiblancos al doblete Liga-Copa.
Pese a ese éxito al año siguiente cambiaba de aires para viajar a Turquía, donde se puso al frente del nuevo proyecto del Gaziantepspor, pero después de un pobre arranque en Liga (5 victorias en las primeras 17 jornadas ligueras), abandonó el club en enero de 2007.
Aceptó una oferta del Al-Ain de los Emiratos Árabes Unidos, pero cinco meses después dejaba este exótico club para retornar a la liga rumana.
En septiembre de ese mismo año aterrizaba en el Dinamo de Bucarest para reemplazar a Mircea Rednic, pero su aventura acabó pronto. Dos meses después de su nombramientos una derrota por la mínima en el derbi ante el Steaua volvía a impedirle terminar la temporada.
Tras un tiempo como comentarista de la RAI, Zenga volvió a los banquillos el 1 de abril de 2008, sustituyendo a Silvio Baldini en el Catania. Con apenas un mes de temporada por disputar, salvó al equipo del descenso y estuvo a punto de sorprender a la Roma y meterse en la final de la Copa de Italia.
Su contrato se amplió, y todo pintaba bien para el ex-guardameta, con un especial hincapié en el balón parado que le valió buenos resultados en la primera parte del campeonato, completando la mejor temporada en puntos de los sicilianos. Pese a todo, el final del campeonato supuso su salida de la entidad de mutuo acuerdo.
El 5 de junio de 2009, después de ser relacionado con la Lazio, estampó su rúbrica en un contrato con el Palermo, sorprendiendo al ligarse al rival directo de su anterior club. Pese a arrancar con victorias en Copa y Liga, poco a poco los resultados empeoraron y un empate ante precisamente el Catania fue el último clavo en el ataúd de Zenga, que fue cesado el 23 de noviembre.
Otra vez tocaba hacer las maletas. El 11 de mayo del año pasado era presentado como nuevo técnico del Al-Nassr saudí, pero sólo duró dieciseis partidos ligueros. Despegado de la cabeza liguera, los dirigentes del cuadro de Riad decidían dejar de contar con los servicios del transalpinos aprovechando el parón del mes de diciembre, apostando por Dragan Skocic.
Esa ha sido, hasta ahora, la última experiencia de Zenga, que aspira a seguir dirigiendo desde el banquillo como lo hizo desde la portería en su época como futbolista en activo.

miércoles, 6 de julio de 2011

Graham Arnold



Damos la vuelta al mundo, y nos vamos desde Bolivia hasta Australia para hablar de este prolífico delantero "aussie" nacido en Sydney hace 43 años, y que acumuló 19 tantos en sus 54 partidos internacionales.
Tras marcar un  montón de goles en el equipo de esta ciudad entre 1982 y 1990, Graham Arnold emprendió la aventura europea, disputando las ligas holandesa y belga durante casi una década.
Un breve paso por Japón, donde vistió los colores del Sanfrecce Hiroshima, y vuelta a casa para ser jugador-entrenador del Northern Spirit entre 1998 y 2001. Allí colgó las botas, consiguiendo en su segunda temporada meter al equipo en los play-off.
Su valía y conocimientos futbolísticos hicieron que la Federación requiriera sus servicios para convertirse en asistente del combinado nacional dirigido por otro viejo conocido de este blog, Frank Farina.
El despido de Farina hizo que pudiera seguir aprendiendo de todo un crack en esto de los banquillos, Guus Hiddink. Junto al holandés vivió el Mundial 2006, y tras su salida los dirigentes federativos no se olvidaron de él, y le nombraron su sucesor.
Su debut se produjo en la fase clasificatoria para la Copa Asiática, consiguiendo el billete para disputar este torneo como campeón del grupo D.
La preparación tuvo luces y claros, algo que se repitió en la competición oficial, hasta que en cuartos Japón acabó con el sueño de los "socceroos" en la tanda de penaltis.
Esta decepción hizo que perdiera la confianza de los directivos, siendo relegado al cargo de seleccionador sub-23, con el objetivo de clasificar al equipo para los Juegos Olímpicos de Pekín. Consiguió su reto al aventajar en tan solo un punto a Irak tras una apretada fase final.
Enrolados en el "grupo de la muerte", junto a Argentina, Costa de Marfil y Serbia fue demasiado para los "olyroos", que sólo sumaron un punto ante Serbia.
Relacionado con equipos como el Bolton y el Norwich, Arnold vió como esas opciones se esfumaban y debía conformarse con mantenerse como asistente del nuevo seleccionador australiano, el holandés Pim Verbeek.
En febrero del año pasado volvía al fútbol de club para sustituir a Lawrie McKinna como nuevo entrenador de los Central Coast Mariners. Su regreso fue afortunado, dejando a los mariners como segundos en la fase regular.
Ya en el play-off los de Nueva Gales del Sur superaron a Brisbane Roar y Gold Coast United para volver a citarse con Brisbane (campeón de la primera fase) en la gran final disputada el pasado 13 de marzo.
Tras empatar a dos en el tiempo reglamentario y la prórroga, los penaltis fallados por Daniel McBreen y Predrag Bojic dejaron a Arnold con las ganas de levantar su primer título como técnico.
Con contrato para las dos próximas temporadas, veremos si sigue con su progresión como técnico y puede asumir desafíos mayores.

martes, 5 de julio de 2011

Gustavo Quinteros



Un ejemplo de que alguien no es "de donde nace, sino de donde pace" es Gustavo Quinteros. El "Facha" nació en Santa Fe (Argentina), pero el fútbol le llevó a nacionalizarse boliviano y jugar hasta un Mundial, el de Estados Unidos, tras hacer carrera en tres clubes del Altiplano: Universitario, The Strongest y San José.
En 1994 sentía nostalgia y retornaba a Argentina para enrolarse primero en San Lorenzo de Almagro y después en Argentinos Juniors, jugando su última temporada como profesional con "El Bicho".
Después de retirarse como jugador, Quinteros se integró en el organigrama técnico de San Lorenzo, fogueándose como técnico del equipo juvenil. En 2003 tuvo un breve paso como entrenador del primer equipo, pero su primer desafío serio no llegó hasta 2005, cuando regresó a Bolivia para ser el DT de Blooming.
Debutó a lo grande, y con un sistema 4-4-2 claramente establecido se hizo con el título nacional, alzando además la Copa Aerosur, lo que atrajo el interés en Argentina. La propuesta de San Martín de San Juan de la segunda división le sedujo, pero allí no repitió suerte, y fue cesado de su puesto.
Fracasado este primer intento de triunfar en el fútbol argentino, emprendía el camino de vuelta a Bolivia y al Blooming en 2007.
Nuevamente se ganaba a la grada. En primer lugar, por ganar una nueva Copa Aerosur, y en segundo, por llevar al equipo a la final del Clausura, que perdía por penaltis ante el Aurora. En el lado negativo estuvo la eliminación en la ronda previa de la Copa Sudamericana por el Olimpia de Asunción paraguayo.
En enero de 2009 expiraba su contrato con el Blooming, pero no se paraba la carrera del "Facha" en Bolivia, firmando por el Bolívar, donde obtuvo el torneo de pretemporada y el título del Apertura. Diferencias con la dirigencia hicieron que este idílico matrimonio se rompiera a finales de 2009.
Convertido en referencia y con un currículum al alcance de pocos (ganando por lo menos un título al año), no tardó en encontrar acomodo. Lo hizo en Oriente Petrolero, sumando un hito más a su exitosa labor en el fútbol boliviano al alzarse con el trofeo invernal.
El 5 de noviembre del año pasado sus merecimientos eran recompensados al ser nombrado nuevo seleccionador de Bolivia. En la preparación para la Copa América los resultados no fueron nada alentadores, sumando tres derrotas y dos empates, pero en el estreno en la máxima cita del fútbol sudamericana todo cambió, empatando ante la anfitriona, la Argentina de Messi, en el primer partido inaugural del grupo A. Para seguir aspirando al papel de cenicienta la "Verde" deberá dar la cara ante Costa Rica y Colombia.

Jozsef Kiprich



La última generación de grandes futbolistas fue la formada por futbolistas como Kiprich, que llegaron a jugar el Mundial de México en 1986.
Tres años después de esa experiencia, la última hasta el momento de los magiares, este delantero ampliaba horizontes para firmar por el Feyenoord holandés. En De Kuip pasó seis años, ganando una liga y cuatro goles, y anotando goles importantes.
En 1995 aterrizaba en Chipre para jugar en el APOEL, con el que consiguió un histórico triplete al que unió el título de máximo goleador del campeonato.
Un paso fugaz por el Den Bosch fue el preludio del regreso a su ciudad natal, Tatabanya, donde seguió perforando las porterías contrarias en sus tres últimas temporadas en activo. En la primera de ellas contribuyó de forma decisiva al ascenso del equipo, mientras en las dos últimas ya ejerció como entrenador-jugador del Lombard FC. Su primer año superó todas las expectativas, y el equipo terminó cuarto de la Primera húngara.
Para su segunda campaña cambió el formato de la competición, dividiendo a los equipos en dos grupos. El Lombard acabó liderando la primera fase, pero el equipo se hundió en la parte decisiva de la temporada y Kiprich fue cesado en marzo de 2001.
Tan solo unos meses después, en julio, se comprometía con el Vasas, pero la suerte no le acompañó. Con quince puntos en las primeras veintidós jornadas llegaba el segundo cese para nuestro protagonista, en el mes de diciembre.
Pero la carrera de Kiprich ya estaba lanzada, y en abril de 2002 bajaba un escalón para sentarse en el banquillo del Kecskemeti, arrimando el hombro para evitar el descenso a Tercera.
Tras triunfar en su país, en julio de 2003 cogía las maletas para viajar a Rumanía, donde le esperaba el Olimpia Satu Mare. Volvió a tener buenas sensaciones, con quince puntos en seis partidos, pero los cantos de sirena hicieron que aceptara el reto de coger las riendas del Gyor Eto en septiembre. Tres partidos invicto relanzaron a los verdes, pero una mala racha acabó con la confianza de la directiva, que decició prescindir de su técnico.
En una decisión sorprendente Kiprich retornaba al Olimpia, dejando al equipo tercero, pero sin alcanzar la promoción de ascenso.
El fútbol húngaro le llamaba una vez más, en esta ocasión para ponerse al frente del Diosgyori-Balaton en la temporada 2004/05. Tres puntos sobre veintiuno posibles determinaron el cambio en el banco.
Esa decepción se atenuó al retomar el contacto con el Feyenoord, para el que ejerció como scouter desde 2005, labor que compaginó con la de técnico del equipo sub-19 del Ujpest.
Su dedicación al fútbol de base acabó en abril de 2007, cuando le llegó la ocasión de unirse al nuevo proyecto del Lombard-Papa, donde permaneció hasta marzo del año siguiente.
Con un currículum extenso pero poco estable, en junio de 2008 estampaba su firma como nuevo entrenador del Gyirmot. En este club por fin pudo desarrollar un proyecto a largo plazo, dirigiendo la nave de los de Gyor hasta hace apenas un mes.
Su próximo objetivo, confirmado dos semanas atrás, le llevará de vuelta donde empezó todo. Su objetivo, devolver al club de su ciudad a la élite del fútbol húngaro que abandonó en el verano de 2008.

lunes, 4 de julio de 2011

Jiri Nemec



Nacido en Pacove hace 45 años, este centrocampista tuvo el honor de jugar en los dos instituciones del fútbol checo (Dukla y Sparta) antes de pasar casi un década corriendo la banda con la camiseta del Schalke 04. Una vez abandonada la que fue su casa de Gelsenkirchen, era hora de retomar las raíces, jugando sus últimos encuentros en varios clubes checos hasta su retirada como jugador del FK Dobrovice a finales de la temporada 2005-2006.
Futbolista checo del año en 1997, títulos de Liga y Copa en la República Checa, en Alemania repitió triunfos ganando la UEFA y la Copa de Alemania con el Schalke. Si ese palmarés es de por si envidiable, Nemec tuvo la oportunidad de lograr algo que sólo había conseguido en una ocasión su país, por entonces unificado con Eslovaquia: levantar la Copa de Europa de selecciones. Fue en Inglaterra, en 1996, cuando Alemania les arrebató in extremis el trofeo con dos goles de Bierhoff que remontaron el conseguido por Patrick Berger.
Una vez colgadas las botas, en el verano de 2006, se incorporó al staff técnico del Dukla como asistente de otro ex-jugador del club, Günter Bittengel para intentar devolver la gloria a un grande venido a menos. En enero de 2007 daba el salto al banquillo para hacerse cargo del equipo hasta final de temporada, debido al fichaje de Bittengel por el Jakubčovice.
Recuperado el tándem en el inicio de la 2007-2008, al año siguiente Nemec volaba en solitario para dirigir al filial, llevando a cabo una gran labor con los valores más jóvenes que continuó al año siguiente con los juveniles.
Su relación con el Dukla se rompió, y en junio de 2010 le llegó la oportunidad de mostrar su valía al ser contratado por el SK Kladno como ayudante, pero no tardó en cambiar de aires por la mala situación económica de la entidad. En enero de este año aterrizaba en el modesto SK Sokol Brozany, de la cuarta categoría del fútbol checo. Los suyos acaban de finalizar cuartos en liga, aunque empatado a puntos con el tercero.

viernes, 1 de julio de 2011

Nikolaos Kostenoglou



Kostenoglou comenzó su carrera como un jugador de fútbol en Xanthi FC el año 1989, y fue traspasado en 1994 al AEK de Atenas, donde este central pasó más de una década, siendo pieza vital de este club, con el que llegó a disputar la Champions League y la Copa de la UEFA.
Su calidad no fue suficiente para tener una carrera destacada en la selección griega, cuya camiseta sólo vistió en una ocasión, en un amistoso contra Israel.
A finales de 2004, con casi 400 encuentros de liga a sus espaldas se retiraba, aunque no abandonaba la entidad en la que se había convertido en todo un ídolo. Pasó dos años dirigiendo al equipo juvenil, hasta que las circunstancias dieron un espaldarazo a sus aspiraciones de convertirse en entrenador.
El 12 de febrero de 2008 el español Lorenzo Serra Ferrer era cesado después de una derrota ante el Larissa que alejaba al AEK a cinco puntos del liderato y a cuatro de la segunda plaza. El "marrón" para el antiguo central no podía ser mayor, ya que al día siguiente el equipo debía afrontar la ida de la tercera ronda de la UEFA ante el Getafe de Laudrup. Su debut se saldó con un empate a uno en el Spyros Louis que dejaba la resolución de la eliminatoria para la semana siguiente en el Coliseum.
La vuelta no fue favorable para los griegos, que quedaron eliminados con un contundente 3-0. Esa decepción se compensó con creces en la Superliga, donde los de Atenas sumaron ocho victorias y diez empates en las diez últimas jornadas. Terminó la fase regular como subcampeón, posición que repitió en el play-off.
Eso no fue suficiente para estabilizar su interinidad, y el 16 de mayo era reemplazado por Giorgos Donis.
Tardó medio año en encontrar un nuevo acomodo. El 20 de noviembre era presentado como nuevo responsable del Asteras Tripolis, que había prescindido del portugués Carlos Carvalhal al situarse en zona de descenso.
Encadenó tres partidos sin perder, pero cuatro derrotas consecutivas complicaron la situación del cuadro de Arcadia. Una gran segunda vuelta dió la salvación a los de Kostenoglou, que completó su gran temporada alcanzando las semifinales de Copa, donde sólo el Olympiakos les privó de jugar la final.
Otra vez el verano dejó a nuestro protagonista sin trabajo, aunque esta vez su siguiente oportunidad no llegó hasta el pasado mes de enero. El cese de Jorn Andersen en el Larisa, el segundo de la temporada tras el de Papakostas, le dió opción de volver a sentarse en un banquillo de la Superliga.
Cumplió el dicho al ganar en su estreno al Iraklis de Ouzounidis, pero a pesar de cierta mejoría los "marrones" perdieron la categoría.
Ese descenso ha provocado que el Larissa haya prescindido de sus servicios, contratando para ocupar su puesto a otro personaje de este blog, el galés Chris Coleman.

jueves, 30 de junio de 2011

Ilie Dumitrescu


Talentoso extremo de la mejor Rumanía, Dumitrescu es otro ejemplo de que en la generación de los noventa no sólo había buenos futbolistas, sino también técnicos en ciernes.
Doce años separaron su primer y su último paso por el Steaua. Entre medias, le dió tiempo a jugar en Inglaterra, España y México, países en los que dejó la impronta de su calidad técnica.
A nivel internacional, jugó 62 encuentros con Rumanía, anotando 20 goles y siendo partícipe de la mejor clasificación histórica de su selección en una Copa del Mundo al llegar a cuartos de final en Estados Unidos 1994.
Cuatro años después, en 1998, decidió parar, pero no quiso alejarse demasiado del mundo del fútbol. Montó una compañía de representación de futbolistas llamada Sport & Business World, pero esta aventura duró poco.
El 6 de diciembre del año 2000 el Otelul Galati le sacaba de los despachos para ocupar su banquillo, con el objetivo de evitar el descenso. Fue su primera experiencia, que después se prolongaría con su fichaje por el Brasov y su aterrizaje en el Alki chipriota, con el que lo hizo muy bien en su primer año, ascendiendo a Primera.
En su segundo año acabó su estancia en Larnaca. El 30 de abril renunciaba al cargo, aunque no estuvo inactivo mucho tiempo, porque volvió a Rumanía para dirigir a la selección sub 21 primero y al Bacau después. No pudo reconducir la situación del equipo, y a finales de mayo de 2003 dejaba su puesto.
Su siguiente trabajo volvió a devolverle a Chipre, para sentarse en el banquillo del Apollon Limassol apenas un mes después de su salida del Bacau. Con un estilo muy italiano Dumitrescu ganó el campeonato de invierno. El arranque de la segunda vuelta no fue bueno, y a eso se unió la oferta del AEK Atenas que hizo que el técnico rumano hiciera las maletas para afrontar este nuevo reto.
El 2 de febrero de 2004 llegaba a la capital griega para suceder a Dusan Bajevic, con un contrato de cuatro meses ampliable a dos años más. Pese a dejar a los suyos cuartos, no continuó tras finalizar la temporada.
Continuó en Grecia, ya que el 18 de enero de 2005 reemplazaba a Stephane Demol en el Egaleo, dejándolo octavo en la Superliga. Al siguiente verano desembarcó en el Akratitos, pero apenas permaneció en el cargo tres meses, ya que el 27 de octubre de ese mismo año firmaba por el Kallithea, en un intento del club por evitar la pérdida de categoría.
Nuevamente protagonizó una sorpresa, ya que el 20 de febrero de 2006 era contratado por uno de los grandes del fútbol griego, el PAOK. Con los blanquinegros luchando por entrar en puestos europeos, la llegada de Dumitrescu no cambió nada, porque los suyos se quedaron a un punto del objetivo.
Con un estilo basado en el "catenaccio" su crédito se fue agotando, y finalmente el 3 de octubre era destituido, lo que le seguía dejando como un técnico sin continuidad.
Esa turbulenta etapa en Grecia dió pasó a un barbecho de nada más y nada menos que tres años, que se rompió al principio de la temporada 2009-2010 al firmar por el Panthrakikos. Cuatro derrotas consecutivas en la Superliga provocaron su cese el 20 de septiembre de 2009.
Tras siete años sin entrenar en Rumanía Dumitrescu volvía a su país por la puerta grande el 11 de agosto de 2010 para hacerse cargo del Steaua, el equipo de su vida. Todo parecía ser de color de rosa, pero apenas seis semanas después protagonizaba la espantada aduciendo que "no podía estar en un sitio donde no se le quisiera". Esta decepción le ha llevado a alejarse de los banquillos durante este último año, aunque no es descartable que vuelva a intentar triunfar como técnico.

Jeaustin Campos



Jeaustin Campos jugó la práctica totalidad de su vida futbolística en el Deportivo Saprissa de su Costa Rica natal. Allí fue partícipe de algunos de los principales éxitos, ganando cuatro campeonatos nacionales y dos Copa de Campeones de CONCACAF, en 1993 y 1995.
También vistió las camisetas del Municipal de Pérez Zeledón y el FC Seúl de la K-League coreana, además de jugar a nivel internacional con el combinado "tico".
Abandonados los terrenos de juego, retornó al Saprissa como director de operaciones en la época en la que Hernán Medford dirigió a los "morados". Allí volvió a aportar su granito de arena para alcanzar logros importantes como dos torneos nacionales, la Copa UNCAF y la Copa de Campeones de la CONCACAF, adquiriendo el derecho a jugar el Mundial de clubes en Japón, en diciembre de 2005, en el que Saprissa terminó en tercer lugar.
Después de que Hernán Medford y su cuerpo técnico fueran contratados por la Federación Costarricense de Fútbol para hacerse cargo del conjunto nacional, Campos fue nombrado por Saprissa como su nuevo entrenador, logrando dos ligas en las temporadas 2006-2007 y 2007-2008.
Poco a poco ese rendimiento fue cayendo y el 11 de noviembre del 2009 se anunció que su contrato y el de su asistente Randall Row habían sido rescindidos de mutuo acuerdo.
En febrero de 2010 firmaba por el campeón puertorriqueño, el Bayamón. Su etapa en tierras boricuas duró sólo diez meses, porque en diciembre regresaba al club con el cual debutó como futbolista en primera división en 1992, el Municipal de Pérez Zeledón, para sustituir al técnico argentino Marcelo Hugo Herrera en el banquillo de los guerreros del sur.
Fue contratado por dos años y medio, y pese a ser eliminado de los cuartos de final del Torneo de Verano por la Liga Deportiva Alajuelense, el presidente del club, Gilberth Fernández, anunció que cumpliría su contrato tras mostarse contento por lo visto por el equipo en el torneo
Jeaustin Campos continuará en la dirección técnica del Pérez Zeledón para el próximo Torneo de Invierno 2011 de la Liga de Costa Rica, esperando lograr una mejora en el rendimiento de los suyos.

martes, 28 de junio de 2011

Steven Pressley



Este central escocés tuvo la oportunidad de vivir "The Old Firm" desde las dos orillas, la protestante y la católica. Formado en la cantera del Rangers, ganó 2 Premier, 1 Copa y 2 Copas de la Liga antes de ser traspasado al Coventry, en el que sólo pasó una temporada antes de retornar a Escocia para volver a ser el mismo de antes en el Dundee (con el que ascendió a la Premier) y el Hearts, con el que levantó un nuevo título copero en 2006.
En diciembre de ese mismo año abandonó Edimburgo para fichar por el Celtic. Dos años como "católico" reportaron una nueva liga y otra Copa a su ya destacado palmarés.
Tras abandonar Celtic Park llegaría pruebas con Doncaster Rovers y Blackpool, pero su siguiente destino le llevaría por primera vez fuera de las Islas, firmando por el Randers danés.
Tras rumorearse sobre una nueva aventura en Suiza o sobre su paso al banquillo del Inverness, firmó por el Falkirk, en cuyas filas se retiró al final de la temporada 2008-2009.
Dejaba atrás 32 partidos con la "Tartan Army" y el récord de ser el jugador del Hearts con mayor número de internacionalidades.
El mismo verano de su retirada decidió dedicarse a entrenar, algo que ya había hecho como interino en Edimburgo durante dos encuentros de la 2004-2005. También había sido ayudante de George Burley en la selección escocesa entre febrero de 2008 y septiembre de 2009, pero abandonó el cargo tras el fracaso en la clasificación para el Mundial de Sudáfrica.
Esos primeros contactos con los banquillos continuaron ya como ex-jugador al ser designado asistente de Eddie May en el Falkirk. La mala temporada del equipo, que era colista a falta de nueve jornadas del final de la Premier, provocó el ascenso de Pressley a la posición de primer entrenador el 11 de febrero del año pasado. Pese a sus esfuerzos no pudo evitar la pérdida de categoría, finalizando a dos puntos de la salvación que consiguió el Kilmarnock.
El descenso no supuso su salida del club, y la temporada recientemente terminada se presentaba como su ocasión para reivindicarse como técnico. Con un año irregular, las eliminaciones en FA Cup y Copa dejaban el ascenso como único objetivo. Sin embargo, los "bairns" se fueron descolgando poco a poco de la luchar por retornar a la Premier, que quedó reservada a Dunfermline Athletic y Raith Rovers.
La decepción se consumó en las últimas jornadas de campeonato, pero pese a todo el contrato de Pressley fue renovado hasta mayo de 2012, confiando en que la próxima campaña se puede volver a la élite del fútbol escocés.

lunes, 27 de junio de 2011

Dietmar Kühbauer



5 goles en 55 partidos con la selección austriaca son los números de Dietmar Kühbauer, un centrocampista que pudo ser más de lo que fue, pero que vió su vida marcada por la tragedia que sufrió en 1997.
Nacido hace 40 años en la pequeña localidad de Heiligenkreuz, muy cerca de la frontera con Hungría, este elegante centrocampista comenzó su carrera como futbolista profesional en las filas del Admira Wacker, debutando a los 16 años en la Bundesliga.
Cinco años de ensueño le valieron su primera convocatoria con la selección nacional y su fichaje por el Rapid. Allí fue pieza clave en una plantilla que logró títulos ligueros y coperos, llegando incluso a disputar la final de la Recopa en 1996, perdiendo por la mínima ante el PSG. En Viena se convirtió en ídolo, siendo incluido en el equipo del Centenario del Rapid.
El 16 de febrero de 1997 ocurrió una tragedia que cambió su carrera personal y profesional. Su mujer Michaela, embarazada de tres meses, sufrió un accidente de tráfico camino del Aeropuerto de Viena, cuando iba a recoger a su marido. Michaela entró en una situación de coma irreversible. Kühbauer, entró en depresión, llegando a hablarse de su retirada.
Superado el shock, decidió cambiar de aires yras ofrecerse en un anuncio por internet y sopesar ofertas de Turquía, Alemania e Italia, Kühbauer se decidió por la Liga española, firmando por la Real Sociedad en junio de 1997.
Pese a contar como valedor con Bernd Krauss y protagonizar un traspaso de 100 millones de pesetas, Kühbauer no volvió a ser el mismo. La muerte de su esposa y los problemas físicos lastraron su estancia en San Sebastián.
La llegada de Clemente al banquillo txuri-urdin fue el epílogo de su aventura española, que acabó en el años 2000 cuando firmó por el Wolfsburgo. Tras dos temporadas irregulares firmó por el modesto SV Mattersburg, de la Segunda austriaca, el equipo de su infancia. Kühbauer jugó cinco temporadas con el Mattersburg, un total de 152 partidos de Liga y marcó 22 goles. El Mattersburg fue el equipo en el que Kühbauer cerró su carrera y en el que más partidos disputó. Un ascenso a la Bundesliga, dos finales de Copa y una clasificación para la UEFA fueron el perfecto colofón a la trayectoria de "Didi" colgó las botas con 36 años de edad y tras dos décadas como profesional.
No decidió desvincularse del fútbol y en diciembre de 2008, después de que conseguir su carnet de entrenador, se convertía en técnico del equipo amateur del Admira.
Su buen trabajo en el filial encontró recompensa, y a finales de abril del año pasado fue ascendido al primer equipo del Admira, después del cese de Walter Schachner.
Debía afrontar un reto importante: ascender a un club con un equipo joven y de bajo presupuesto. Seis victorias consecutivas le llevaron a soñar con este objetivo, que finalmente recayó en el Wacker Innsbruck.
La temporada pasada ha sido la de su confirmación como entrenador. Tras sufrir un varapalo en Copa, catorce jornadas sin perder dejaron a los de Kühbauer como líderes indiscutibles de la Segunda austriaca. La segunda vuelta fue más irregular, pero pese a todo el Admira ascendió a la Bundesliga con un punto de ventaja sobre el SCR Altach.
A ese triunfo, que le hará debutar el próximo verano en la élite del fútbol de su país, se une el hecho de ser el primer entrenador del Admira que ha ocupado ese banquillo durante más de un año desde Milano Miklavic en la temporada 1999-2000.

viernes, 24 de junio de 2011

Igor Pamic



Goleador allá por donde pasó, las ligas croata, francesa, alemana y austriaca fueron el coto para Pamic desde sus primeros pasos como futbolista profesional en Pula. Fichado por el Dinamo de Zagreb, ésta fue su etapa más estable, ya que en las cuatro siguientes temporadas llegó a vestir tres camisetas distintas, las de Osijek, Sochaux y Hansa Rostock.
En 1999 aterrizaba en Austria para asentarse, esta vez sí, en el Grazer. Allí jugó hasta el verano de 2001, retirándose cuando sólo contaba 32 años.
Dado el nivel de la selección croata a finales de los noventa, Pamic sólo tuvo cinco ocasiones para enfundarse la arlequinada, aunque eso no le impidió dejar su sello de matador, anotando un gol. 
Decidido a emprender una trayectoria como técnico Pamic decidió volver a su ciudad natal e ir poco a poco, haciéndose cargo del modesto Zminj, de la Tercera División croata, en la temporada 2002-2003.
A principios de 2004 daba un salto al fichar por el NK Pula, con el que cosechó buenos resultados. Al final de la temporada llevaba al equipo a ascender a la máxima categoría. Su segunda campaña no fue tan exitosa, y abandonó el club en el parón invernal.
Su siguiente equipo fue nuevamente el Zming, al que dirigió durante un año hasta que en 2007 se unía al Karlovac, al que llevó al ascenso a Segunda en la 2007-2008 tras ganar el campeonato de la zona Oeste.
Si ya de por sí era un logro, Pamic y los suyos no se cansaron, y al final de la 2008-2009 completaban la machada ascendiendo a Primera como subcampeones de liga.
Llegaba así la oportunidad para Pamic y el Karlovac, que no desaprovecharon la oportunidad de enfrentarse a los mejores equipos del país. Y a fe que no lo hicieron: alcanzaron los octavos de final de Copa, y soñaron hasta última hora con disputar la Europa League, aunque finalmente hubieron de conformarse con la sexta plaza final.
En su segundo año el listón estaba alto, pero no fue óbice para que el equipo luchara nuevamente en la parte alta de la tabla. Fue así hasta que el 23 de marzo de este año anunciaba su adiós para firmar, una semana después, por el NK Istra (nueva denominación del Pula), que intentaba eludir el descenso. No logró el milagro, y finalmente los de Pula firmaron el descenso, siendo el primer fracaso como técnico de Pamic.

jueves, 23 de junio de 2011

Albert Ferrer



Como futbolista, pocos peros hay que poner al protagonista del post de hoy. Amo y señor de la banda derecha del Barça durante prácticamente toda la década de los noventa y pieza clave en el crecimiento del Chelsea, Albert Ferrer se convirtió, por méritos propios, en uno de los mejores laterales derechos de la historia del fútbol español.
Títulos en Can Barça y Stamford Bridge se unieron al oro olímpico logrado en Barcelona 92 con una generación irrepetible en la que estaban Guardiola, Kiko, Amavisca o Abelardo, por citar sólo unos pocos. Únicamente se le resistieron los torneos con la selección absoluta, con la que participó en los Mundiales de Estados Unidos y Francia.
En el verano de 2003 colgaba las botas, después de cinco buenas temporadas en el Chelsea, y decidió volver a España. Ya en casa tomó el camino elegido por muchos compañeros de profesión, ejerció como comentarista radiofónico en Onda Cero, a la vez que participó en la retransmisión de partidos en canales como La Sexta, Antena 3 y Canal + Liga.
Tras varios años en la tribuna de prensa, el 29 de octubre de 2010 bajaba al césped para hacerse cargo del Vitesse holandés en sustitución del destituido Theo Bos. El antiguo lateral derecho del Barça y de la selección se mostró confiado en su presentación, afirmando que su falta de experiencia como entrenador "no iba a ser un problema".
El "Chapi" firmaba por año y medio con el club con el que se estrenaba como entrenador, y para ayudarle contaría con el apoyo de dos asistentes: Stanley Menzo y el también español Albert Capellas Herms.
Su debut se produjo el 20 de noviembre en un encuentro contra el Heracles Almelo, con el equipo dos puntos sobre el descenso. Los goles de Pröper y Setvanovic le valieron sus tres primeros puntos como técnico, rematando su buen debut con un empate ante el De Graaschap.
El final de 2010 y el arranque de 2011 no fueron tan buenos, acumulando cuatro jornadas sin ganar. Esa mala racha se rompió con una goleada al Roda (5-2).
La irregularidad fue la nota de un equipo que se mantenía en la parte baja de la tabla, pero ampliando su renta respecto a la zona caliente de la clasificación. Si una victoria ante el Groningen le permitió ascender a la décimocuarta posición, tres derrotas en las jornadas finales hicieron sufrir hasta el final a los de Ferrer, que a pesar de todo consiguieron salvar la cabeza in extremis.
Esas malas sensaciones finales hicieron que se empezara a especular sobre el futuro del entrenador catalán. Esos rumores se hicieron noticia ayer, cuando el Vitesse anunciaba el fin de la relación entre Ferrer y el club de mutuo acuerdo.
Tras esa primera experiencia agridulce, ahora habrá que esperar para conocer el futuro inmediato del "Chapi" en los banquillos.