viernes, 18 de febrero de 2011

Zvonimir Soldo



Otro peso pesado de la Croacia de los años noventa y de principios del siglo XXI. A pesar de jugar casi una década en su país, Soldo se convirtió en todo un símbolo del Stuttgart alemán,  donde pasó los últimos diez años de su carrera, acumulando casi cuatrocientos partidos oficiales con los de Baden-Württemberg.
En el verano de 2006, abandonados ya los terrenos de juego, retornó a Croacia. Casi inmediatamente después se incorporó al Dinamo de Zagreb como entrenador de sus categorías inferiores, donde empezó a dar muestras de los conocimientos adquiridos durante sus dos décadas como futbolista profesional.
Unos meses después daba el salto al primer equipo, después de la dimisión de Branko Ivanovic tras una goleada de escándalo ante el Slaven Belupo (5-2).
Soldo debía afrontar la segunda vuelta con una clara renta de doce puntos sobre el NHK Rijeka, que no sólo mantuvo sino que incrementó al final de la liga, alzando su primer título en el año de su debut como técnico profesional. Puso la guinda al pastel ganando la Copa ante el Hadjuk Split por un claro y contundente 3-0. Lo que debía ser una noche de alegría tuvo sabor agridulce, ya que anunció su salida del cargo para dejar lugar, curiosamente, a su predecesor en el cargo.
Tras un año fuera del circuito, volvía lo grande, y en junio de 2009 se hacía cargo del Colonia. A sus 41 años tenía la difícil misión de reemplazar a Christoph Daum, que acababa de firmar por el Fenerbahce turco.
Al equipo le costó entrar en juego, y pasó el primer mes de liga sin conseguir la victoria. Esa mala racha se rompió precisamente ante el Stuttgart, y poco a poco el rendimiento mejoró, llegándose a las Navidades con los suyos fuera de los puestos de descenso. 
A la vuelta de la competición los de Soldo mantuvieron el tipo, terminando a media tabla, y llegando a cuartos de final de la Copa.
Este año arrancaba su segunda campaña con la intención de mejorar aún más sus números, pero se topó con la dura realidad, con dos duras derrotas ante Kaiserslautern y Werder Bremen. A pesar de remontar el vuelo ganando al Sankt Pauli y empatando ante el Bayern, el equipo entró en barrena a partir de ese momento enlazando cinco encuentros sin ganar. La derrota ante el Hannover 96  (2-1) el pasado 23 de octubre colocaba al Colonia colista y precipitaba la destitución de Soldo, que deberá esperar turno para poder volver a sentarse en un banquillo y resarcirse de esta decepción.

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