Todo un clásico del fútbol soviético y ucraniano en los años 80 y 90, su primer trabajo como entrenador llegó en 2002, cuando se hizo cargo del Olimpiakos, equipo en el que había jugado una década antes. No tardaron en llegar los resultados, porque esa misma temporada se hacía con el título liguero en un emocionante final que se resolvió por gol average. Al año siguiente no pudo repetir hazaña, y fue el Panathinaikos el que le devolvió la moneda por sólo dos puntos.
Tras un paso por la liga chipriota, en 2005 tomó las riendas de un clásico europeo, el Steaua de Bucarest. Su primer objetivo no se cumplió, ya que no consiguió la clasificación para la fase final de la Champions League al caer eliminado por el Rosenborg. En liga las cosas iban mejor, estando cerca de la cabeza, pero donde realmente dió el salto de calidad fue en la Copa de la UEFA, donde clasificó al equipo para dieciseisavos de final en un grupo potente con Hertha de Berlin, Sampdoria y Lens.
En diciembre de ese mismo año Protasov recibía una llamada de su país y abandonó Bucarest para firmar por el Dnipro Dnipropetrovsk. Condujo al equipo a la sexta posición liguera en su estreno, clasificación que mejoró la siguiente temporada al finalizar cuarto.
En la 2007-2008 el Dnipro parecía encaminado a conseguir el campeonato, pero una pésima segunda vuelta le relegó a la sexta plaza final.
La cosa empeoró al verano siguiente, cuando fue eliminado por el Bellinzona en la fase de clasificación de la Copa de la UEFA, lo que acabó con su destitución.
Su siguiente ocupación no tardó en llegar, ya que fue incorporado por el Kuban Krasnodar ruso para dirigir su nuevo proyecto, volver a la Premier. Lo consiguió al acabar segundo, pero los problemas económicos del club llevaron a la disolución del contrato de acuerdo mutuo.
Su caché se mantenía en Grecia, y firmó por el Iraklis un contrato de cuatro años a razón de 400.000 euros. No pudo finalizarlo, ya que a finales de octubre fue destituido tras una racha de cinco derrotas consecutivas entre Liga y Copa.
Después de su periplo por Grecia, Protasov volvió este verano a Rusia, donde se ha hecho cargo del FK Rostov. Ahora mismo los del Don son séptimos de la Premier, pero a sólo 3 puntos de puestos europeos.
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