Después de una exitosa trayectoria como jugador, que le llevó a jugar en equipos de la talla de Manchester United, Inter de Milán y Liverpool, se retiró de los campos de fútbol en el Swindon Town, donde compaginó las tareas de jugador y entrenador.
Unos meses después de esa experiencia le llegó la oportunidad de entrenar al Macclesfield Town, donde sustituyó a Brian Horton, y consiguió salvar al equipo de un descenso al que parecía abocado.
Ese primer éxito condujo sus pasos al Milton Keynes Dons, donde levantó su primer título al vencer al Grimsby en la final del Johnstone's Paint Trophy en Wembley. Ese éxito hizo que incluso se barajara su nombre como posible técnico de equipos de mayor envergadura como Wigan o Derby County.
No tardaría en dar el sato de calidad, ya que en junio de 2008 fue designado manager del Blackburn Rovers, convirtiéndose de paso en el primer negro en ocupar un cargo de ese tipo en la Premier League. Sin embargo, fue destituido después de menos de seis meses en el cargo, tiempo en el que el club había logrado sólo 3 victorias en 17 partidos.
El inicio de la nueva temporada le llevó de nuevo al MK Dons, donde firmó un contrato por dos años. No llegó a cumplir ni el primero, ya que anunció su decisión de abandonar el club en abril de 2009, hecho que finalmente se produjo a finales de esa campaña.
Pese a estar en el paro, su nombre no ha dejado de sonar para sentarse en algún banquillo. El último equipo con el que se le ha relacionado insistentemente ha sido el Middlesbrough, donde sustituiría al escocés Gordon Strachan.
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