Murat Yakin

Miembro de una saga futbolística en suiza junto a su hermano menor Hakan (que sigue en activo en el Lucerna), Murat Yakin desarrolló su carrera entre Grasshoppers, Stuttgart, Fenerbahce, Kaiserslautern y Basilea. Con los blaugranas jugó seis temporadas divididas en dos temporadas antes de abandonar los terrenos de juego a los 32 años en 2006.

Ese mismo verano empezó a tomar contacto con la dirección técnica de equipos al convertirse en ayudante de Walter Grüter en el Concordia de Basilea. El equipo "congeli", por entonces en la segunda división del fútbol helvético, hizo una buena campaña acabando quinto, aunque lejos de los puestos de ascenso.

La temporada siguiente supuso un cambio de aires para Yakin, que fichó por el Grasshoppers como asistente de Hans Peter Latour. En Copa los "saltamontes" cayeron en octavos ante el Basilea, fracaso que se repitió al acabar cuartos, lejos del título, que volvió a recaer en el cuadro comandado por Christian Gross.

Dejó su cargo en febrero de 2008 para hacerse cargo de su primer banquillo, el del Frauenfeld. Al no tener carnet, el turco se decantaba por entrenar a un modesto equipo de la segunda regional, mientras obtenía la titulación necesaria para dirigir a un club de élite en el fútbol de Suiza.

Después de cuatro meses decidió volver a Zurich para hacerse cargo del equipo reserva del Grasshoppers. Allí permaneció durante un año hasta que en julio del año pasado por fin le llegó la llamada del Thun.

El equipo empezó funcionando bien, aunque en la quinta jornada sufrió un traspiés en su visita al Laussane. Lo solucionó una semana después goleando al Stade Nyionnais por un espectacular 9-0, colocando a los suyos en los puestos de cabeza en dura pugna con el Winterthur y el Lugano.

Poco a poco Lugano y Thun se quedaron sólos en la lucha por el campeonato, que finalmente cayó del lado del Thun de Yakin por sólo un punto, logrando un brillante retorno a la Super Liga. El entrenador de orígen turco remató su buena labor llegando a cuartos de final de la Copa.

El desafío aumentaba para nuestro protagonista, que no ha podido tener un mejor debut en la élite del fútbol helvético. El Thun se mantuvo invicto durante las siete primeras jornadas de liga (dos victorias y cinco empates) y ahora mismo, cuando estamos en el ecuador del torneo, mantiene a su equipo sexto, aunque a cuatro puntos de los puestos que darían derecho a disputar la Liga Europa. Además, en Copa se mantiene vivo, y en el próximo mes de marzo se enfrentará al Neuchatel Xamax.