Lito Vidigal

A pesar de haber nacido en Angola y haber representado a nivel internacional a este país, Lito Vidigal tiene a Portugal como patria futbolística. Campomaiorense y Os Belenenses disfrutaron del juego de este defensa antes de abandonar la práctica del fútbol activo en el Santa Clara a los 35 años.

Sus primeros pasos como entrenador le llevaron a Madeira, para hacerse cargo del Pontassolense de la categoría del fútbol luso. En la isla permaneció tres años, yendo de menos a más, y guiando a los suyos a la segunda plaza final en su última temporada.

De Madeira saltó al continente para dirigir a otro modesto como el Riberao durante la temporada 2007-2008. Con esa experiencia en el bolsillo por fin le llegó la ocasión de aceptar retos superiores: a principios de junio firmaba contrato válido por dos temporadas con el Estrela de Amadora, sucediendo en el puesto a Dauto Faquirá, que se había comprometido con el Vitória de Setúbal.

Allí no pudo terminar su trabajo, ya que en noviembre abandonaba el club tras enfrentarse a la directiva por el impago de las nóminas de su futbolistas.

Esta decepción no acabó con sus ganas de seguir entrenando, y en febrero de 2009 llegaba al Portimonense de la Liga Vitalis (Segunda División) tras la marcha de Vítor Pontes. Con el descenso acechando, Vidigal no mejoró en exceso el rendimiento de los del Algarve, pero al menos salvó la categoría.

No le dió tiempo para acabar su segundo año, pese a tener líder al equipo, porque a finales de octubre de 2009 era reclamado por el Unaio Leiria de la Liga Sagres para sustituir a Manuel Fernandes. Volvía a la máxima categoría del fútbol del país vecino, y no lo hizo nada mal, dejando a la entidad en novena posición.

A punto de arrancar la nueva campaña surgieron nuevamente conflictos extradeportivos para Vidigal, y los desencuentros entre entrenador y directiva por la composición de la plantilla se rompieron como siempre por el lado más débil: el angoleño entraba en conflicto con el club, que anunciaba la rescisión de su contrato el 8 de julio de 2010.

Desde entonces y hasta el pasado 9 de enero se mantuvo alejado del césped. Ese día la Federación Angoleña de Fútbol anunciaba su contratación como máximo responsable de la selección absoluta. Cumplido ese sueño, Vidigal no ha tardado en cosechar éxitos: apenas hace una semana los "palancas negras" llegaban a la final del Campeonato de las Naciones Africanas de Sudán, aunque finalmente cedían ante Túnez. Ahora este equipo seguirá enfrentándose a grandes desafíos. El primero arrancará a finales de marzo, cuando las "palancas negras" iniciarán su camino hacia la Copa de África del año que viene en Gabón y Guinea Ecuatorial.